Muchos pensarán… pagar ? Dinero?
Y realmente nos referimos a algo mucho más valioso y es la comunicación sana y equilibrada, que nuestro perro debe tener con nosotros para darle todo lo que esté a su antojo.
¿Cómo así que equilibrada?
Un perro que sabe reaccionar de forma adecuada o tranquila en diferentes situaciones que se ve envuelto, ya sea con otros perros, personas, objetos en movimiento, ruidos o espacios desconocidos, lo podemos llamar equilibrado.
Cómo me puede empezar a pagar mi perro?
Sencillo, comportándose de la forma que yo quiero, y esto no quiere decir que tengamos que ser “fuertes y dominantes” al hablarles, castigarlos físicamente, o retarlo a el para convertirme en el “líder de la manada”, expresiones que en contexto están herradas.
El precio que mi perro me tiene que pagar lo denominamos CALMA. Si, así como lo leen, que mi perro esté en calma.
Este pago es el que yo debo ENSEÑARLE, toma tiempo, muchas repeticiones, y se requieren excelentes y coherentes recompensas.
¿Cómo lo enseño?
Reforzando con snack, caricias, juegos, paseos o palabras motivadoras todos los comportamientos en (Calma) que mi perro me de.
Ej: esperar en calma cuando se abra la puerta, sentarse para pedirme su alimento,paseo y caricias, que espere atento a sus comandos y podamos recompensar o enseñar la obediencia.
Y en el momento que NO me de la calma como medio de pago, simplemente ignoro y sigo con mi rutina normal, por nada del mundo obtendrá su recompensa con una conducta sobreexcitada.
Ahora entiendes por que si reforzamos lo contrario a la calma, el mal comportamiento nunca desaparecerá.
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